En San Cristóbal todo parece haber vuelto a la normalidad pese a que Chiapas aún se mantienen en semáforo naranja por el alto riesgo de contagios por el COVID-19, Cerca de 200 vendedores ambulantes, en su mayoría indígenas, han salido a las calles sin las medidas preventivas necesarias ante la apremiante situación económica, luego de cinco meses de no hacerlo, sin embargo, incrementa el riesgo de contagio.