El presidente ruso, Vladímir Putin, confirmó este jueves que Rusia lanzó un ataque a Ucrania con un misil balístico hipersónico de alcance medio, el Oreshnik, sin carga nuclear.
El misil fue dirigido contra una instalación del complejo militar-industrial de Ucrania, según indicó el mandatario en un mensaje a la nación transmitido por la televisión pública. Este nuevo ataque forma parte de la creciente escalada en el conflicto, que ha tomado dimensiones cada vez más globales.
Putin explicó que, a raíz de los ataques de largo alcance con proyectiles estadounidenses y británicos utilizados por Ucrania, la guerra ha adoptado "elementos de un conflicto global". Sin embargo, el presidente ruso aseguró que esos proyectiles no fueron efectivos contra los objetivos rusos, señalando que Rusia continúa con su estrategia de defensa y ataque, mientras el conflicto se intensifica desde su inicio en febrero de 2022.
Durante su intervención, Putin también abordó la creciente tensión internacional y afirmó que Estados Unidos ha sido responsable de la destrucción del sistema de seguridad internacional. "No Rusia, sino EE. UU. ha destruido el sistema de seguridad internacional", declaró, refiriéndose a los misiles ATACMS y Storm Shadow que han sido utilizados por Ucrania en sus recientes ofensivas. Esta acusación subraya las diferencias cada vez más marcadas entre las potencias involucradas en la guerra.
El presidente ruso argumentó que su país tiene el derecho a recurrir a la fuerza militar contra instalaciones de aquellos países que permitan que sus armas sean utilizadas contra objetivos rusos. Además, criticó a Estados Unidos por "violar el compromiso sobre la liquidación de misiles de largo alcance", recordando que los sistemas de misiles estadounidenses han sido distribuidos en diversas regiones del mundo.
La situación se sigue complicando, y el mandatario aseguró que, aunque Rusia prefiere soluciones pacíficas, está lista para cualquier eventualidad. "Siempre habrá una respuesta", afirmó Putin, subrayando que su país no se quedará de brazos cruzados ante los ataques que considera una amenaza directa.
El mismo día de su mensaje, el Ministerio de Defensa de Rusia informó que, en las últimas 24 horas, sus sistemas de defensa aérea lograron derribar dos misiles de crucero Storm Shadow, de fabricación británica, durante un nuevo enfrentamiento en el cielo. Mientras tanto, las Fuerzas Armadas de Ucrania también continuaron con sus ofensivas, y la madrugada del 19 de noviembre realizaron un ataque con misiles ATACMS contra una instalación militar en la provincia rusa de Briansk.
A medida que el conflicto se alarga y se intensifica, la comunidad internacional sigue preocupada por la posibilidad de que la guerra entre Rusia y Ucrania se convierta en un conflicto de mayor alcance, involucrando a más naciones y afectando a la estabilidad global.