Pérdidas de por lo menos 50 por ciento de sus ingresos provocará a restaurantes, hoteles, bares y todos los comercios donde se expenden bebidas alcohólicas, la aplicación de la ley seca los días sábado 1 y domingo 2 de junio con motivo de la jornada electoral 2024, según la cámara nacional de comercio.
La ley general de instituciones y procedimientos electorales (LGIPE)
Artículo 300
El día de la elección y el precedente, las autoridades competentes de acuerdo a la normatividad que existe en cada entidad federativa, podrán establecer medidas para limitar el horario de servicio de los establecimientos en los que se sirvan bebidas alcohólicas.
De acuerdo con el artículo 300 de la ley general de instituciones y procedimientos electorales (LGIPE), la ley seca podrá aplicarse en las entidades federativas que se considere necesario el día de los comicios y hasta un día previo a su realización.
Respecto a las afectaciones para el sector restaurantero, la cámara nacional de la industria de restaurantes y alimentos condimentados (CANIRAC) de Veracruz, hizo un llamado para que ésta medida únicamente se aplique el día de las elecciones.
Las multas por violar la ley seca oscilan entre los 2,020 y 2, 286 pesos, pero los infractores también pueden enfrentar arrestos de 25 a 36 horas.
ley general de instituciones y procedimientos electorales (LGIPE).
Respecto a la hora, será cada entidad quien determine el horario en que se aplicará dicha medida, aunque se prevé que se restrinja la venta de bebidas alcohólicas desde las 00:00 horas del sábado 1 de junio, hasta las 20:00 horas del domingo 2 de junio, tiempo después del cierre de las casillas electorales.
Ciudadanos coinciden en que independientemente de la venta de alcohol cada persona es responsable de acudir a votar de manera ordenada, por lo que la medida de poco sirve.
Muchos ciudadanos optan por comprar alcohol con antelación, lo que disminuye el impacto preventivo. en lugar de evitar el consumo, simplemente se cambia el momento en que las personas lo adquieren.
La ley seca en México, implementada durante las elecciones, ha sido objeto de críticas por su efectividad limitada y su impacto negativo en la economía de restaurantes, bares y comercios. Aunque su intención es prevenir disturbios y asegurar que los votantes acudan a las urnas sin estar bajo la influencia del alcohol, la realidad muestra que la medida tiene varios inconvenientes y efectos adversos.