Como parte primordial del desarrollo económico, es como consideran los transportistas de carga su actividad, debido a ello las peticiones que mantienen desde hace años, son múltiples.
En el más reciente paro nacional, una de las solicitudes era acabar con la restricción de circulación en las ciudades, ya que cuentan con un horario para hacerlo y de no respetarlo, en algunos casos están obligados a pagar un permiso.
En la ciudad de México solo se permite la circulación de estas unidades en un horario de 6 a 10 de la mañana, esto también aplica para los 18 municipios del Estado de México.
En el caso de Guadalajara la ley establece que las unidades no pueden entrar en la Zona Metropolitana de 6 a 9 de la mañana.
En Veracruz únicamente se permite su circulación de 10 de la noche, 6 de la mañana.
En promedio, el costo por circular dentro de la zona metropolitana Veracruz-Bocal de Río- Medellín y Alvarado es de 300 pesos
Con esta restricción se busca la reducción del tráfico en horas picos, así como el mejoramiento de las condiciones ambientales y evitar accidentes.
Recientemente, un tráiler doble cisterna con 40 mil litros de amoniaco quedó atorado en el distribuidor que lleva a la plaza El Dorado, en el municipio de Boca del Rio-Veracruz provocando el desalojo de un centro comercial.
Tras cinco horas de maniobras la unidad logró salir, no se registraron lesionados.
De acuerdo al Instituto Mexicano del Transporte, en promedio se registran alrededor de 3 mil 500 accidentes en donde se ve involucrado el transporte de carga. Asimismo, señala que las condiciones del vehículo fueron el detonante de 518 accidentes provocados por camiones, representando el 13.7% de las causas.
En cuanto a la inseguridad, en promedio un camión de carga es robado cada 45 minutos en el país, lo que representa que diariamente se pierdan al menos 17 millones de pesos, por el robo de mercancía de acuerdo a Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI). Tal situación propuesta ha generado reacción de los transportistas que se han manifestado y bloqueado las principales carreteras a lo largo del país.
Los actos criminales, además de representar pérdidas económicas, también traen consecuencias para la competitividad, a ello se suma, el alza de los combustibles y los casos de corrupción. Se trata de una larga lista de problemáticas por atender, para que el transporte de carga se consolide, como el detonante económico que tanto anhela.