Funcionarias públicas evaden acusaciones de nepotismo u otras irregularidades, argumentando un tema de género; alertó la académica de la Escuela Nacional Judicial, Alejandra Torres Mendoza.
"A mi me parece que el hecho que llegue una mujer a cualquier cargo pública no la exime de las críticas, y esto hay que tenerlo muy claro. La ciudadanía tenemos todo el derecho de criticar, cuestionar a cualquier persona servidora pública, pero sí quiero subrayar que hay formas, hay maneras de criticar esto".
Esta crítica implica el no usar palabras violentas, sexistas o misóginas, sin caer en frases misóginas, pero que muchas mujeres en la política argumentan violencia política.
"No hay que confundir, evidente puede haber una línea muy delgada entre señalar los actos de nepotismo, las relaciones familiares, y decir que una mujer simplemente -por acceder a un cargo teniendo una relación familiar- es un títere".
Señaló que en esto no solo participa un partido político o una coalición, sino todas las instituciones partidistas incurren en estas prácticas de nepotismo.