Octavio Acosta, secretario particular de la presidenta municipal de Sayula de Alemán, Lorena Sánchez Vargas, fue asesinado a balazos el domingo 27 de febrero, durante el desalojo de un predio invadido.
El hecho generó particularmente la atención tras las declaraciones vertidas por la alcaldesa, quien acusó al periodista Santos López Celdo como presunto sospechoso del crimen.
La edil confirmó que el funcionario municipal participaba en el desalojo que, dijo, se desarrollaba de "manera pacífica". Aunque mostró una publicación en la que supuestamente el comunicador lo amenazó de muerte, además de que lo vinculó con un grupo delictivo.
Lorena Sánchez Vargas solicitó la intervención de Gobierno del Estado para que se investigue y se detenga al comunicador, reiterando que fue el único que amenazó de muerte a su secretario, Octavio Acosta.
Por su parte y tras la seria acusación en su contra, el reportero del Diario del Istmo, Santos López Celdo, solicitó el apoyo de la Comisión Estatal para la Atención y Protección de Periodistas (CEAPP).
A través de un video, el comunicador solicitó la activación de un protocolo de seguridad, pues dijo temer por su integridad y la de su familia, dedicada al comercio.
El periodista reiteró el llamado a las instancias federales y estatales, y negó categóricamente cualquier responsabilidad sobre el hecho en el que Octavio Acosta perdió la vida. Así como cualquier vínculo con la delincuencia organizada.