Luego de un proyecto que contemplaba el retiro de decenas de árboles, 49 ejemplares derribados, un plantón ciudadano, 16 mil 255 firmas a favor de la cancelación de la obra, un camellón en resistencia, una suspensión concedida por un juez federal y casi 80 días después?
"Vemos que ellos están en total desacato, están aventando escombro y poniendo las brocas de la perforadora en el camellón y sabemos que el juez primero de distrito, juez federal, dictaminó, ordenó que la empresa no puede continuar"
El camellón en resistencia ha permanecido en pie de lucha haciendo frente a la empresa Construcciones y Desarrollo Macon, quiénes al día de hoy aún realizan avances pese la presencia de los manifestantes y de poner en riesgo su integridad.
Incluso a pesar de haber sido desacreditados por el propio Gobernador y estar expuestos a intimidaciones por elementos de Seguridad Pública.
"La empresa no puede continuar, debe de parar hasta que entregue una modificación, ya la ha pedido varias veces, al proyecto, cosa que no ha entregado y dice que no pueda dañar, ni remover ningún tipo de flora o arbolado que esté sobre el camellón y es lo que vemos que están haciendo en este momento"
A pesar de todas estas situaciones hay personas, incluidos menores de edad, que continúan sumándose a las labores de lucha, en donde es importante destacar que de verse involucrados en algún percance o accidente en donde algún manifestante resulte lesionado, la responsabilidad podría recaer en la empresa o la Secretaría de Infraestructura y Obras Públicas.
"La responsabilidad directa por una lesión a cualquier o por cualquier persona que sufra una lesión, directamente es penal, pero la responsabilidad civil objetiva es de la empresa y la responsabilidad por la violación le corresponde directamente entonces a la entidad que este ejecutando la obra"
La modificación del proyecto por parte de la autoridad aún está en espera y aunque el gobernador confirmó que se realizará, mientras esto ocurre son los civiles quienes tienen que arriesgarse para preservar los pocos árboles que quedaron en pie.