Personal de la Procuraduría del Medio Ambiente procedió a colocar sellos de clausura a la Unidad Deportiva del municipio de Yanga, lugar que fue habilitado por el alcalde como basurero.
Los habitantes del municipio se dijeron molestos por la situación y responsabilizaron directamente al presidente municipal Apolinar Crivelli Díaz, aseguran que fue él quien tomó dicha determinación.
Destacaron que no es la primera vez que dicho lugar es utilizado como basurero clandestino, ya que previamente ya habían sido apercibidos y obligados a depositar los desechos en el basurero regional de Cuitláhuac.
Lamentaron que en esta ocasión los desperdicios dañaron el césped y los pasillos del lugar, por lo que esperan que el castigo sea para el actual mandatario y no sea el ayuntamiento de Yanga el que tenga que absorber las multas.