Ignacio Ayala Fararoni es uno de tantos ciudadanos con discapacidad que acumuló infinidad de iniciativas para atender las necesidades de personas como él.
Y es que el Congreso de Veracruz ni siquiera quiso recibir sus propuestas, mucho menos las tomó en cuenta para legislar en la materia.
Entre las peticiones ignoradas por la Sexagésima Sexta Legislatura de Veracruz destacan:
- Una consulta respecto a la implementación de acciones afirmativas en favor de los derechos político electorales de las personas con discapacidad ordenada por el Tribunal Electoral de Veracruz.
- La promoción de un juicio para la protección de los derechos político electorales de ciudadanos con discapacidad.
- La impugnación de artículos del Código Civil para el Estado de Veracruz que transgreden los derechos de igualdad y no discriminación de las personas con discapacidad.
Contrario a ello, durante la legislatura pasada se presentó una iniciativa para crear un área dependiente de la Secretaría de Gobierno que atendiera la accesibilidad de las personas con discapacidad en recintos como Palacio de Gobierno.
Aunque se trata de una atención que ya está establecida en la Ley 822.
Artículo II
1. Accesibilidad. La construcción de elementos constructivos, operativos y de diseño que permiten a cualquier persona con discapacidad entrar, desplazarse, salir, orientarse y comunicarse con un uso seguro, autónomo, y cómodo en los espacios construidos, así como en el mobiliario de y el equipo de éstos;
La falta de legislación en la materia se notó en el reducido número de iniciativas de salud, en perjuicio de éste y otros sectores.
A pesar de ello, algunos ciudadanos ya trabajan para que en Veracruz se instaure el primer congreso inclusivo del país, mediante una aplicación móvil que facilite la atención de personas con discapacidad, iniciativa que al menos ya está sobre la mesa de los diputados que integran la Sexagésima Séptima Legislatura.