Las ventas de comerciantes instalados sobre la calle de Pípila se han visto afectas por la documentación que un particular emitió ante las autoridades municipales y de Tránsito del Estado.
En dichos papeles, se solicitó que se impida el estacionamiento de unidades sobre el tramo que va de Francisco I. Madero a 20 de Noviembre, algo que afecta la actividad comercial de los negocios ahí instalados.
Por si fuera poco, los comerciantes aseguraron que los documentos girados por el particular fueron emitidos a las autoridades locales con aparentes firmas falsas, ya que en ellos también se hizo una solicitud al Ayuntamiento para reubicar a la estación de los Autotransportes Banderilla.
Los vecinos solicitaron la atención de las instancias locales, mismas que han ignorado los documentos que los propios locatarios emitieron a fin de que no resulte afectada la actividad comercial de la zona.