En México la incidencia de personas con síndrome de Down es de aproximadamente uno por cada 650 nacimientos
Las personas con síndrome de Down se enfrentan a menudo con el estigma y la segregación, el maltrato físico, psicológico y la falta de igualdad de oportunidades y por ende la discriminación.
Activistas, señalan que el circulo vicioso de la exclusión on puede comenzar a muy temprana edad al negarles el acceso a una educación normal, o para los adultos a quienes se les niega oportunidades de desarrollo laboral y profesional
Datos de organizaciones internacionales indican que la incidencia estimada de síndrome de Down es 1 de cada mil nacimientos en todo el mundo. Cada año de 3 mil a 5 mil niños nacen con ese trastorno cromosómico.
Estadísticas oficiales señalan que hasta el último censo de 2020, se contabilizaron 12 mil personas con este padecimiento en Veracruz.
July es una pequeña de 12 años de edad que pese a que ha desarrollado diversas habilidades entre ellas ser una gimnasta profesional, se ha enfrentado al rechazo de la sociedad.
La falta de conocimiento y de sensibilidad de las personas ha generado que quienes padecen este síndrome sean vistas como seres que no pueden realizar actividades comunes; sin embargo está demostrado que con atención médica, psicológica y otras actividades pueden lograr ejercer una vida similar o igual que cualquier ser humano.
La lucha de activistas, asociaciones civiles e instituciones como el Instituto Mexicano de Investigación y Desarrollo Integral (IMIDI) han logrado que la inclusión de este sector de la población tenga mayores oportunidades; sin embargo aún persiste la discriminación en todos los ámbitos de la sociedad.