Las elecciones están a la vuelta de la esquina. En estados como Veracruz ?chapulinear? es parte de la estrategia para acceder a nuevos puestos sin importar que los aspirantes ya cuenten con algún cargo público.
María Guadalupe Márquez Leonardo, Lupita como se promueve a sí misma, buscó abandonar la Regiduría Séptima de Xalapa para llegar al Congreso.
Pese a las manifestaciones de quienes se autodenominaron como ?militantes auténticos de Morena?, a la edil no le quedó de otra más que permanecer en el cargo luego de ser rechazada.
Allegados a la Regidora Séptima buscaban posicionarla nuevamente de cara a las elecciones de este año, aunque sus aspiraciones no prosperaron, caso contrario al de Daniel Fernández Carrión.
El Regidor Decimosegundo fue candidato a la diputación federal por el Partido Verde Ecologista de México, en 2018, luego de su primer periodo como edil de Xalapa.
Este 2024, Fernández Carrión tiene aspiraciones para ocupar una curul local.
Estos casos se repiten en todos los municipios veracruzanos, donde los cacicazgos y reelecciones en el Congreso permiten la prevalencia de familias y grupos políticos en el poder.
"Chapulinear" se volvió una costumbre descarada para enriquecerse y mantener el fuero, lo que a su vez ha permitido la corrupción tan criticada por el gobierno en turno.