El estrés es un estado de preocupación o tensión mental generado por las distintas situaciones a las que nos enfrentamos, aunque es una respuesta natural ante amenazas y otros estímulos, también puede acarrear consigo enfermedades e incluso la muerte.
El estrés, los accidentes laborales, largas horas de trabajo y enfermedades relacionadas al trabajo causan 374 millones de muertes al año
Fuente: Organización Internacional del Trabajo
Otros malestares físicos que pueden ser provocados por este estado mental son malestares intestinales, como vómito y diarrea, dolores de cabeza, disfunción sexual entre muchos más que en ocasiones son normalizados por quienes lo padecen.
Para lograr diferenciar si estos malestares son derivados del estrés, es importante poner atención a lo que ocurre en nuestro entorno para detectar si lo que le ocurre al cuerpo es reflejo de una situación de estrés.
Los padecimientos derivados del estrés son incontables y pueden ir desde el insomnio hasta llegar a aumentar los riesgos de enfermedades cardiacas, la diabetes, la obesidad y otras enfermedades crónicas.
Al estrés se vinculan los accidentes laborales que cobran la vida de alrededor de mil personas de forma diaria.
Fuente: Organización Internacional del Trabajo.
Dadas las condiciones de vida actuales, es importante además de identificar la fuente del problema, saber cómo atacarlo para mejorar la salud.
Lamentablemente no existe una fórmula mágica para tratar el estrés o un tratamiento que todos quienes lo padecen puedan seguir paso a paso, esto derivado de los intereses y gustos personales, por lo que cada uno debe trabajar en su propio proceso.