Mascotas, instrumentos para la extorsión

Los animales domésticos en muchos casos han dejado de ser una simple mascota, para convertirse en un miembro más de las familias en el mundo?

Se estima que el 56% de la población mundial tiene al menos, una mascota.

El 80% de la población latinoamericana tiene un animal a su cargo.

Fuente: All-PetFood

Esta situación y apego que los humanos tienen hacía ellos, desarrollando un afecto y amor por estos, ha propiciado que algunas personas busquen aprovecharse de estos sentimientos.

Si bien en México la ley no contempla el secuestro de animales, quienes exigen un pago a cambio de su devolución, sí están incurriendo en un delito.

Cabe destacar que cuando el animal no es encontrado en la vía pública y fue directamente sustraído de su vivienda, esto constituye un delito diferente.

Sanciones por robo:

 Desde 3 meses hasta 12 años de prisión.

Sanciones por extorsión:

 Desde 3 a 10 años de prisión.

Sanciones por maltrato animal:

 Desde 6 meses hasta 3 años de prisión.

Fuente: Código Penal para el Estado de Veracruz

Esta modalidad de robo y extorsión ha ido al alza en Xalapa, logrando detectarse algunos puntos en donde operan los delincuentes.

Las recomendaciones para quienes atraviesan por una situación de esta naturaleza, van, desde mostrarse cooperativo, hasta dar aviso a las autoridades para solicitar un acompañamiento y con ello garantizar la seguridad del animal y la del propietario.

Recomendaciones de seguridad en caso de sufrir un robo o extorsión por medio de una mascota:

Mostrarse cooperativo para garantizar la integridad del animal

Llegar a un acuerdo en caso de ofrecer una recompensa

Acudir acompañado al punto de reunión por amigos o familiares

Pedir acompañamiento a la autoridad (Brigada de Salud Animal)

Solicitar asistencia de Resistencia Ciudadana Xalapeña (22 86 15 66 80)

Fuente: Resistencia Ciudadana Xalapeña

Lamentablemente el cuidado y el amor por los animales de algunas personas, no garantiza su seguridad, ya que existen personas dispuestas a utilizarlos como una herramienta para extorsión.