El diputado local del partido Revolucionario Institucional (PRI), Marlon Ramírez Marín, señaló que antes de que existiera un dictamen que no permitiría aprobar la cuenta pública 2021, se registraron diversas quejas de alcaldes en funciones, de que no se tomaron en cuenta los dictámenes de entrega-recepción.
Expuso, que tras las irregularidades que se detectaron en el informe, decidieron no aprobarla y dar tiempo al organismo de fiscalización de rectificar la documentación.
Cabe recordar, que la auditora lamentó que desde el Congreso del Estado se estuviera politizando el trabajo que realizó el personal del ORFIS por meses; además, de que, mencionó que se necesitaría al menos 8 millones de pesos para hacer una nueva revisión.
En ese sentido, el legislador, admitió que la lógica marca que se le tendría que aprobar recursos extras para que se realice una nueva revisión, sin embargo, aseguró, que no se ha hecho la petición formal.