Con campanas en mano, trabajadores de Limpia Pública marcharon desde la Subdirección ubicada en Rébsamen hasta el centro de la Xalapa para reclamar el apoyo del gobierno estatal luego de que la capital se quedara sin un lugar para depositar toda su basura.
Los trabajadores afirmaron que todo el parque vehicular se encontraba lleno de basura, con más de 300 toneladas de desechos de todo tipo.
Por lo que no había forma de realizar recorridos para limpiar las esquinas repletas de bolsas.
Tras manifestarse accedieron al diálogo e ingresaron a Palacio de Gobierno.
Sin embargo y al no obtener respuesta marcharon nuevamente. Ahora con dirección al Congreso del Estado, donde solicitaron el apoyo de la legislatura para delimitar el destino final de los residuos.
Elías Durán / Reportero