Luego del derrumbe del pasado 26 de octubre que bloqueó en su totalidad el tránsito sobre la autopista Orizaba-Puebla, a la altura de las Cumbres de Maltrata, algunas estimaciones señalan que la movilidad podría ser reabierta hasta dentro de tres meses, solo en uno de los dos carriles.
Y es que a 16 días del percance, que además sepultó varios vehículos, las labores de remoción del material que cayó desde lo alto del cerro se realizan de manera lenta debido a las condiciones climatológicas, que en ocasiones impiden que los trabajadores puedan avanzar con mayor celeridad.
Del mismo modo se calcula que hasta el momento se ha realizado el retiro del 8 por ciento de toda la tierra y piedras que obstaculizan la vía de comunicación. A todo esto se suma que dado el cambio de administración estatal y las fiestas decembrinas los trabajos puedan tardar más de lo previsto.