Zacatecas, Zac. Tras nueve años de estar en una casa hogar, la mujer wixarika Silvia logró que sus hijas regresaran a vivir con ella.
"Son cuatro niñas. Jessica, Sara, Sofia y Julia".
Silvia Valdez González, es originaria San Sebastian, Jalisco y desde muy pequeña tuvo que casarse.
"Yo me junte de 12 años con una persona ya mayor. Mi esposo tenía 40 cuando yo me junto de 12 y luego de 13 tuve un bebé, se me murió y 14 ya tuve la que tengo aquí la grande".
Fue a partir de ahí que por casi diez años Silvia y sus hijas tuvieron que pasar una vida llena de maltrato por parte de quien era su pareja, hasta el extremo de ver en riesgo sus vidas.
"Un día quiso matar el bebé, la más chiquita, entonces de ahí fue lo que yo separe. Yo dije, pues no me compró para que yo voy estar, aunque me comprara no es justo para que yo esté aquí".
Con esa fuerza, tomó a sus hijas y huyó de la violencia, donde en varias ocasiones incluso quiso ser obligada por su agresor a regresar sino incluso amenazó con matarla, pero afortunadamente recibió el apoyo que necesitaba.
"Una persona me comento de una casa hogar aquí en Zacatecas porque es un misionero que va a la sierra, vive aquí en Zacatecas, se llama Arnulfo García. Me comenta de una casa hogar; si algún día pasa algo cuente con nosotros porque van a estar seguras tus hijas, tú vas a estar en un lugar también seguro".
Silvia decide entonces viajar a Zacatecas capital donde para proteger a sus hijas decide ingresarlas en la mencionada casa hogar donde podía verlas cada ocho días, sin embargo, al cabo de nueve años las condiciones de las menores cambio.
"Yo ya veía que mis hijas no eran igual como antes, entonces yo le estuve preguntando por qué están así; entonces la más grande nada más se agarraba llorando y no decía nada. Tenía un moretón en sus brazos y yo ya me había dado cuenta una semana, mi hija también traía. Entonces no es justo, yo que ya conozco lo que es pues mejor yo me atrevo a sacarlas".
Tras este lamentable suceso, Silvia inicia el trámite para recuperar a sus hijas, apoyada por el Centro de Atención a la Violencia Familiar de Zacatecas (CAVIZ) y tras trámites el pasado 20 de agosto por fin pudo recibir ya a las cuatro niñas.
"Sabemos que tu no vas a poder, así me decían, yo nada más me quedé pensando, si puedo".
Actualmente, el talento y capacidad de Silvia, la ha llevado a salir adelante con la confección de hermosas artesanías wixarikas, actividad que la ha convertido en empresaria. Hoy, las artesanías de Silvia llegan a latitudes inimaginables y con sus hijas al lado, hoy parece que un mal capítulo ha terminado.
"Yo nunca pensaba que yo iba a tener pedido fuera de aquí de Zacatecas, en España, de Turismo. Yo nunca pensaba eso pero me da gusto".