Fueron asesinadas en Chilpancingo, Guerrero cuatro personas, todas integrantes de una familia. Los cuerpos presentaban signos de violencia, fueron hallados en una región indígena en la que, hace unas semanas, un grupo de 20 niños fue armado e integrado a la Policía Comunitaria para vigilar mientras los adultos buscaban a los desaparecidos.
Los cuerpos fueron hallados en bolsas negras el lunes sobre la carretera Chilapa-Tlapa, en el punto conocido como Las Antenas, donde autoridades indígenas señalan al grupo delictivo Los Ardillos de la violencia criminal que ha asolado la región en los últimos años.
La Fiscalía General del Estado (FGE) informó abrió una investigación por el delito de homicidio calificado de Roberto, Gaudencio y José, así como de Cecilia, de quien se investiga bajo el protocolo de feminicidio.