El Gobierno del Estado de Nuevo León clausuró la Refinería de Cadereyta, argumentando que la compañía se negó a colaborar con la Secretaría del Medio Ambiente y no permitió que personal de la dependencia ingresara para inspeccionar la planta.
A la planta petrolera acudió el secretario de Medio Ambiente Alfonso Martínez y el regidor de San Pedro Javier González Alcántara, quien externó que Petróleos Mexicanos (PEMEX) no los recibió y permanecieron afuera de las instalaciones.
Alcántara explicó que se tenía la facultad de la clausura en caso de no permitir la inspección al interior. La clausura se dio después de que un juez federal ordenara la revisión por parte del estado, la cual se realizó hoy bajo el argumento de las altas concentraciones de contaminantes durante la mañana del viernes.
Con información de Marcela Perales