Zacatecas.- La difícil travesía de los migrantes por Zacatecas se vio empañada por nuevas adversidades cuando, después de haber quedado varados en el municipio de Calera, se encontraron con una situación desesperante en Cañitas de Felipe Pescador. Se estima que alrededor de 3000 migrantes han sido afectados, enfrentando sed, hambre y las inclemencias del tiempo, así como abusos por parte del personal del Instituto Nacional de Migración (INM), durante más de cuatro días.
Tras avanzar desde Calera de Víctor Rosales, los migrantes fueron engañados por las autoridades migratorias, que cambiaron el tren en el que viajaban. Sin embargo, en Cañitas de Felipe Pescador, la locomotora abandonó los vagones, dejándolos varados. A pesar de la situación desesperada, agentes del INM les impidieron moverse para buscar agua y alimentos.
Ante esta emergencia, los migrantes y grupos de apoyo han lanzado un llamado desesperado a la ciudadanía, solicitando ayuda con alimentos, agua y otros suministros necesarios para sobrellevar su travesía.
La difícil situación que enfrentan los migrantes en su paso por Zacatecas pone de relieve la necesidad urgente de proporcionarles apoyo humanitario y protección, así como de abordar las condiciones que los obligan a emprender este peligroso viaje en primer lugar.