Obispo anuncia panorama alentador para la iglesia católica

Zacatecas, Zac.- A través de un video difundido en redes sociales, Sigifredo Noriega Barceló, Obispo de Zacatecas, dio a conocer que el día 13 de mayo fiesta de Nuestra Señora de Fátima, se recibió la noticia del plan de reapertura a una nueva normalidad, dicho anuncio invita a mirar con atención y responsabilidad compartida los pasos a dar para afrontar los días después de la crisis sanitaria, así lo comentó.

Señaló que la larga espera parece estar llegando a su fin, por lo que las próximas semanas llaman a la sociedad a cultivar la salud de alma, cuerpo y espíritu, generando una creativa solidaridad y construyendo la salud del tejido social, enfermo por tantos virus y egoísmos.

Invitó a los zacatecanos a seguir y acatar las indicaciones que la iglesia diocesana considera oportunas para el momento crítico que se vive. Hoy más que nunca debemos estar unidos mirando hacia el bien común, refirió.

Como segundo invitó a respetar las instrucción de las autoridades del Estado de Zacatecas, San Luis Potosí y Jalisco sobre las estrategias a seguir para prevenir contagios, y promover la salud integral.

Enfatizó que estarán en comunicación permanente para atender la decisión de la reapertura de los templos y la celebración de culto público en sus diversas manifestaciones, como tercer punto dijo que se encuentran conscientes de que la reapertura debe ser gradual, ordenada, caura, prudente, solidaria y generosa, por lo que es indispensable la disponibilidad y la comunicación permanente para colaborar con las autoridades municipales y locales.

Concluyó diciendo que la Diócesis estará al pendiente de la fecha de reinicio de actividades cuando las autoridades lo determinen. Por lo que el 30 de mayo darán a conocer las instrucciones generales y particulares.

 "Para la preparación de la reapertura que va del 18 de mayo al 31 del mismo mes, hemos organizado la Diócesis en seis Zonas Pastorales. El Vicario Episcopal de Zona se reunirá con los respectivos Decanos para animar, formar, preparar y socializar los protocolos sanitarios, litúrgicos y pastorales aplicables en cada semáforo. las decisiones generales que se tomen deben ser aprobadas por el Obispo". Dijo