Cerca de mil 500 estudiantes marcharon en Zacatecas para conmemorar la Matanza de Tlatelolco, a 50 años del movimiento estudiantil que marcó con sangre la historia de todo un país.
La tarde del 2 de octubre de 1968, estudiantes de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y del Instituto Politécnico Nacional (IPN), entre otras instituciones, fueron víctimas de la represión por el gobierno del expresidente priísta Gustavo Díaz Ordaz.
La masacre acabó en la Plaza de las Tres Culturas y al día siguiente la noticia quiso pasar desapercibida.
"Es una fecha muy importante para nosotros, sabemos que se cumplen 50 años de lo acontecido en el 68 y como estudiantes universitarios no podemos dejar de lado este acontecimiento histórico, tenemos que hacerle frente", dijo Francisco Martínez, secretario general de la segunda sección del FEZU.
Este martes a las 9:30 de la mañana, jóvenes de la Universidad Autónoma de Zacatecas, mítines de escuelas privadas y sociedad en general, se congregaron en la explanada de la Unidad Académica de Ingeniería para hacer sonar el "2 de octubre no se olvida, es de lucha combativa".
Encabezados por el Frente de Estudiantes Zacatecanos Unidos (FEZU) mostraron solidaridad y empatía por el acontecimiento, confiando en que la memoria histórica prevalece.
Margarita Ramos, secretaria general de esta organización añadió: "Porque pudiéramos ser mil universitarios y si no sabemos porqué estamos aquí entonces no tiene caso. Los comités de lucha tuvieron, precisamente, esa función: concientizar a los compañeros y compañeras, que sepan porqué están aquí y que entiendan que debemos seguir organizándonos".
La marcha recorrió el bulevar José López Portillo y se incorporó al Centro Histórico por la avenida González Ortega, para concluir en la Plaza de Armas.
En el trayecto, recordaron que la masacre del 68 no dista mucho del caso Ayotzinapa, otro ataque a las fibras más sensibles del país y una razón más para mantenerse en pie de lucha.
"Yo sí veía en los estudiantes como -un día de pinta, un día de fiesta, no vamos a ir a clase, vamos a salir a gritar-, pero yo creo que Ayotzinapa en ese sentido es importante porque resignifica el 2 de octubre y porque los jóvenes vuelven a ver que todavía hay violencia, que todavía hay represión, que todavía vivimos en un medio de impunidad y eso hace que las marchas adquieran un nuevo sentido político, yo creo que sí ha servido para la concientización política de una nueva generación", comentó el doctor en Historia, Eduardo Jacobo Bernal para Meganoticias.
Además, habló de la vigencia de este movimiento y la revolución cultural que implicó a nivel mundial, donde la juventud fue la protagonista.
"Estamos hoy viendo en la UNAM que hay procesos similares,vimos hace poco este enfrentamiento del plantel Azcapotzalco con los porros. Entonces yo creo que sigue siendo un tema muy presente y que la historia debe servir no solo para sentir nostalgia por el pasado, sino para replantear nuestros problemas del presente".
En su conferencia magistral: 2 de Octubre a 50 años de la revolución cultural del 68, destacó la permanencia de las problemáticas por las que los estudiantes levantaron la voz hace medio siglo.
"En el 68 era impensable y era un atentado en contra de las libertades civiles ver al ejército en las plazas y hoy, a 50 años, nos hemos acostumbrado a la militarización en el país... Debe ser una memoria militante, no solo para recordar, que el día de mañana 3 de octubre todo mundo diga no pues ya se acabó, sino que tiene que ser un proceso, tenemos que seguir luchando día a día por lograr estas libertades, por lograr una democracia, por lograr un Estado más abierto".