La desinformación que persiste entre los adolescentes y jóvenes, ha provocado que se incremente la incidencia de embarazos de alto riesgo, debido a que luego de confirmar su estado, no dan continuidad a sus chequeos médicos durante los meses posteriores, aumentando el riesgo de complicaciones en la salud de la mamá y del bebé, al momento de dar a luz, derivando incluso en casos de muerte materna.