La violencia e inseguridad que se registra en la conurbación Zamora-Jacona ha detonado el incremento de consumo de drogas en jóvenes de 15 a 25 años de edad y a su vez, propicia que los centros de rehabilitación de adicciones se encuentren saturados, además que no cuentan con licencia municipal de funcionamiento e incumplen con los protocolos y medidas de seguridad y protección civil, tal cual lo establece la ley contra adicciones de Michoacán. Tan sólo en Zamora se contabilizan 100 centros que brindan alojamiento a personas que consumen diversas sustancias ilícitas.
De acuerdo a especialistas, la violencia ha propiciado el aumento de jóvenes asesinados por el consumo de drogas y la incursión en organizaciones criminales, también el consumo de cristal, ha desencadenado problemas de salud mental y nutricional.
Los centros revisados no cuentan con un médico de cabecera, ni psicólogos, ni personas capacitadas, por lo que se han presentado violaciones a los derechos humanos al interior de estos albergues, situación que deberán de revisar las autoridades de salud.