Directivos, personal administrativo y alumnos de la Universidad Pedagógica Nacional unidad 162 en Zamora, así como las subsedes de Jiquilpan, Cherán, Pamatácuaro, La Piedad, Coahuayana, El Faro de Bucerías, se pronunciaron en contra de las acciones que vulneren la integridad emocional o física de la comunidad estudiantil o que por razones de género sufran cualquier tipo de violencia.
Piden a las autoridades correspondientes medidas de prevención y de protección a las víctimas, además solicitan la revisión de protocolos, con el fin de sancionar eficazmente a quienes incurran en prácticas que vulneren la integridad de las personas.
Además señalan que los procesos legales son enredosos y tardados.
"Porque las denuncias llevadas a fiscalía a instancias estatales, educativas, contraloría parecen no tener la facultad de sanción'.
"Mientras las víctimas siguen deambulando por más de 7 meses en un caso que tenemos de oficina en oficina", señaló la directora de la institución Socorro Ramos.