Ante el problema de contaminación en la cuenca del Río Duero que ha preocupado por décadas a los agricultores y a diversas instituciones de investigación, se buscan algunas soluciones, el tema se agudiza al detectar otro tipo de contaminantes. En aguas abajo, en 2005 en las comunidades de San Simón y la Estanzuela encontraron una concentración de plomo de 0.02 miligramos por litro, para el 2008, está concentración aumentó 30 veces hasta 0.63 miligramos por litro, lo que trae consecuencias para el medio ambiente y para la salud de la población.