Aunque no se registró la misma afluencia de comensales que el 10 de mayo, restauranteros de Zamora reportaron un incremento de ventas de hasta un 30 por ciento, con motivo del festejo del día del padre, dando un respiro a la economía del sector, tras las afectaciones que la pandemia por el COVID-19 y el constante incremento de los insumos básicos les ha generado durante los últimos años.