Además de la falta de personal que presentan las corporaciones de justicia, la falta de información que existe entre la población entorpece que haya posibles avances en las investigaciones en caso de algún delito, como secuestro, robo de vehículo, homicidio o desaparición de personas, ya que un número importante de los afectados no saben en dónde o con quién deben dirigirse, mientras que otras desisten debido a lo engorroso que resultan los procedimientos.