El cierre definitivo de alrededor de 2 mil negocios durante la contingencia sanitaria por el COVID-19, ha propiciado que los pequeños y medianos comerciantes de la ciudad de Zamora se queden sin un sustento para sus familias, provocando también una afectación directa para los empleados. Se estima que cada establecimiento cuenta con al menos una persona contratada. Los emprendedores tuvieron que cerrar sus comercios por la falta de liquidez para el pago de los servicios básicos, renta y salarios. Informó el vicepresidente de la federación de Cámaras de Comercio, José García Velázquez.