Continúa la controversia generada por la instalación del Centro Comunitario de Salud Mental (CECOSAME), en las inmediaciones del Santuario Guadalupano, ante esta situación las autoridades de la Diócesis de Zamora, fijaron su postura señalando que no están en contra que se construya un espacio para atender problemas de salud mental, sin embargo explicaron que el espacio del antiguo centro de salud no es apto para instalar consultorios y espacios para la atención de pacientes con problemas de depresión o adicciones.
Además refirieron que el terreno ubicado entre las calles 5 de mayo, Melchor Ocampo, Niños Héroes y Justo Sierra fue concedido en administración a la Diócesis de Zamora, con la intención de que algún día, el Santuario pueda llegar a ser Catedral, con estacionamiento, sanitarios, sacristía, oficinas, consultorios para atender emergencias.
Por lo anterior, las autoridades eclesiásticas reiteran la petición al Gobierno de Michoacán para que se reubique el centro de salud mental, ofrecieron terrenos propios de la Diócesis para que se cambie la sede.