Debido al incremento de casos de COVID-19 en los municipios de la región Zamora, las autoridades eclesiásticas prevén que todas las celebraciones litúrgicas de la Semana Santa se celebren sin fieles para evitar la propagación del coronavirus.
Durante la pandemia, cerca de 40 sacerdotes de la Diócesis de Zamora han enfermado de COVID, 3 de ellos perdieron la vida, ante esta situación el consejo presbiterial que está conformado por sacerdotes de las diversas foranías, se reunirán en los primeros días del mes marzo para definir si las actividades por semana santa estarán restringidas para los creyentes o si las harán a puerta cerrada como en el año 2020.