El 2019 fue un año complicado para los pequeños productores, las lluvias fueron escasas e irregulares, situación que provocó que las plantas no desarrollarán la formación del fruto; inclusive, el maíz no alcanzó ni para forraje ganadero, perdiendo así el 100% de la inversión, el trabajo y el anhelo de cosechar lo que con esfuerzo plantaron.
Esta situación no es diferente para este año, las pocas lluvias, la falta de apoyos gubernamentales y la crisis económica que enfrentan los agricultores avizora un panorama complicado para ellos, comentó Miguel Plancarte productor de fresas y hortalizas, quien desde hace más de 40 años trabaja en el campo.