Desde el inicio de la contingencia sanitaria quienes se vieron afectados en primera instancia fueron los comerciantes, en el caso de los locatarios del mercado Zaragoza en Jiquilpan, en un inicio sus ventas disminuyeron hasta en un 50% en promedio, ahora casi 6 meses después han bajado hasta un 80%. En este sentido quienes venden productos perecederos como la verdura y fruta resienten las bajas ventas también en la perdida de su producto.
Solicitar algún préstamo o apoyo por parte del gobierno resulta complicado para los locatarios principalmente por los requisitos y el papeleo que es solicitado, dejando con pocas opciones a los comerciantes para seguir surtiendo sus productos.