El cambio de uso de suelo para la plantación de aguacate u otras frutas, ha propiciado que varias hectáreas de bosque se deforesten, en el caso de la comunidad indígena de La Cantera en Santiago Tangamandapio es una problemática recurrente, además de las enfermedades que acaban con los árboles nativos, durante los últimos meses, cerca de 30 pinos han sido cortados por diversas razones.
Otra de las finalidades de las guardias comunitarias, además de salvaguardar la integridad de las personas, es conservar las zonas boscosas, por tal motivo realizan recorridos de vigilancia en los cerros de la comunidad, para evitar la tala clandestina.