Durante la temporada de estiaje es común que los ganaderos resientan en su economía por que el precio del alimento es alto y es necesario comprar más, pues se reducen los espacios para llevar las vacas a pastar, además de tener que garantizar el agua para su ganado.
El médico veterinario zootecnista, Mario Carrión, aseguró: "Con los aumentos del alimento pues tuvieron que pues darle menos de comer y utilizar más lastre más rastrojo y eso llevó a que se bajaran los índices de productividad de los animales"
En promedio hay mil 800 ganaderos en la región Ciénega, es común que una de las estrategias para garantizar el alimento para las vacas sea vendiendo algunas, a esto los ganaderos se refieren cuando dicen que las vacas se comen a las otras, esto podría garantizarles alimentarse en promedio un mes, como fue el caso del ganadero Luis Manuel, actualmente tiene 6 vacas, aunque le gustaría tener más, este año tuvo que vender 2.
El ganadero, Luis Manuel Bautista, comentó; "Tenía más animales pero como vendí 2, para comprar, para comprar ahorita que hay paja que muelen, para comprar para estar alimentando a los animales"
A la semana sus vacas se comen 6 bultos de 40 kilos de pastura, gastando tan solo en eso 1,980 pesos, esto sin contar que compra agua de pipa cada 5 días para su ganado, para poder obtener un promedio de 250 litros de leche a la semana, con las ganancias es con lo que va sobrellevando la situación económica.